Vaca Muerta: del salto histórico del shale a la paradoja de magnitud en las aulas

El complejo productor no convencional se encamina a cerrar el mejor semestre de la historia en Vaca Muerta en materia de producción. Mayo permitió ver la foto final de un doble récord de petróleo y gas. Se trata de un capítulo más en la seguidilla de mejores registros, que caracterizan un 2024 en el que Argentina se evita un frente macroeconómico aún más pesadillesco gracias al aporte de Neuquén y las productoras: unos 105,5 millones de metros cúbicos diarios de producción de gas y 394.010 barriles diarios de crudo.

Este viernes, se sumó un posible aliciente para esos volúmenes que caracterizan el actual ciclo en medio de la mayor demanda invernal de gas: SACDE comunicó la culminación de la primera de las dos plantas compresoras para el tramo 1 del Gasoducto Néstor Kirchner. Permitirá añadir 5 MMm3/d a los 11 MMm3/d que ya transporta el tendido. Impactará en el corto plazo, asimismo, en ahorros sustanciales en dólares.

La situación, por contraposición, vuelve a plantear la pregunta sobre las demoras en esa obra. Al respecto, el gobierno nacional anterior y el actual se pasaron facturas por la falta de transferencia de fondos que hubieran permitido culminar antes ese complemento clave para el ducto construido en tiempo récord.

Si las dos plantas compresoras previstas ya estuvieran finalizados, Argentina se habría evitado salir de urgencia a comprar cargamentos de GNL, a un precio mayor que los casi 4 dólares por millón de BTU del costo local, y también combustibles líquidos, más caros y de mayor impacto ambiental. Resta todavía una planta compresora, la de la cabecera de Salliqueló, en la provincia de Buenos Aires. Al final del proceso, el tendido duplicará su capacidad de bombeo.

Otros dos temas sobresalieron en la agenda política local. Uno de ellos, con impacto en el mundo de la gestión provincial más cercana a la ciudadanía. Porque, si Neuquén votó por un cambio primero que nadie en el país, también lo hizo castigando la falta de respuestas para lo que no estaba sucediendo. En parte, el acceso a soluciones para una creciente demanda social de oportunidades, calidad de vida e infraestructura en el mismo lugar donde las cifras sobre la disponibilidad de recursos adquieren formas no tan usuales a lo largo y ancho del país.

Vaca Muerta es un territorio de ambigüedades casi por definición, donde muchos viven en mejores condiciones atados (sabiéndolo o no) al devenir de la producción no convencional. En simultáneo, un 50% de la población se encuentra debajo de la línea de la pobreza, instalada en una puja por acceder a un mejor modo de vida. Sucede en pleno salto demográfico, con otros nuevos habitantes impulsando una ola migratoria que presiona sobre esa demanda social.

En ese contexto, en el plano de la gestión, Neuquén consiguió el respaldo del gobierno nacional para tomar deuda para un ambicioso plan de infraestructura con el que podrá afianzar ese vínculo con jefes comunales que dan gobernabilidad y cierto compromiso político de forma interna. (Luis Caputo, el ministro de economía que tuvo su visita debut a Loma Campana, dio el visto bueno en la previa del tratamiento legislativo que convalidó la Ley Bases este jueves.)

Dentro de ese esquema de necesidades el gobierno neuquino (con el aporte de petroleras) hace foco la demanda educativa con su plan de becas. La agenda central de la educación en Neuquén sumó un conflicto esta semana que detonó una paradoja difícil de explicar para quienes la protagonizan.

El gremio de los docentes, ATEN, discute medidas de fuerza por una ley sancionada esta semana. A instancias del MPN, los diputados provinciales avalaron por mayoría otorgar un 15 por ciento de salario adicional para los trabajadores que no falten a dar clases. El aporte se suma al contexto previo: uno de los mejores acuerdos salariales del país. Los docentes actualizan sus sueldos por inflación en cada trimestre, al igual que el resto del arco de trabajadores estatales. Sin casi poder justificar la oposición -la conducción sindical afirmó que debió haberse discutido en una mesa salarial previa-, la compleja interna del gremio docente discute medidas de fuerza que podrían afectar el alicaído desempeño en las escuelas provinciales en las últimas dos décadas.

Esta semana hubo otra extraña nota al pie en medio de los registros récords. La comunidad mapuche Paynemil afectó la producción de Loma La Lata, informaron fuentes de la industria, en el yacimiento que permitió pensar en grande en el gas argentino en la década del 90 y los primeros años 2000. El argumento para un bloqueo que también mantuvo trabajadores sin poder salir del bloque en manos de YPF: una casa se había quedado sin la provisión de GLP. Cuando un camión quiso proveerlo, tampoco lo dejaron entrar, se informó. Uno de esos reclamos no tan entendibles con trasfondos de difusa explicación. Como sea, todo lo que no tiene que ver con las seguridades jurídicas que requiere el próximo salto en Vaca Muerta, que ya cuenta con un régimen de incentivo casi exclusivo avalado por diputados el jueves en el Congreso, y sobre el cual ya se proyectan los grandes saltos exportadores, que tuvieron esta semana un importante cónclave acerca de las rutas para ese crecimiento realizado por el IAPG Comahue en Neuquén.

En paralelo, la Legislatura neuquina también protagonizó un nuevo capítulo en un culebrón por entregas: las represas del Comahue y la finalización de las licencias para su explotación. El lunes el gobierno provincial se desayunó con la creación de cuatro empresas para administrar las represas de los ríos Limay y Neuquén. Esto provocó una réplica de la provincia, que reclama la puesta en marcha de la mesa de diálogo para definir cómo se saldará la administración de esos complejos generadores, de la que quiere ser parte junto con Río Negro, ya que la titularidad del recurso es de ambas provincias, como lo establece la Constitución.

Al mismo tiempo, los legisladores provinciales, que aplicaron un nuevo canon por uso de agua en un escenario de sucesivas prórrogas a las concesiones, le pidieron informes al Estado nacional sobre la nueva estructura empresaria que quedará en manos de ENARSA y Nucleoeléctrica Argentina. Esta historia, está claro, también continuará, pero habla de una suerte de doble carril: de ciertas coincidencias en el mundo Vaca Muerta y de tensiones respecto del estratégico uso del agua, que tuvo como novedad también el anticipo de la provincia de una red azul de transporte para el abastecimiento del segmento no convencional.